CONDADO ORANGE, Florida. – Julie Ann Sulpizio, esposa y madre de los sospechosos de matar a un policía de Lake durante una emboscada, se declaró no culpable del cargo de delito capital del que se le imputa.
Sulpizio fue detenida luego de que el 2 de agosto se reportara un tiroteo en el que otros dos agentes de la Oficina del condado Lake resultaron heridos. Su esposa e hijas se autoinfligieron un disparo.
Durante entrevista con las autoridades, la mujer había dicho que era enviada especial de Dios y que su esposo era Dios.
También había dicho que tenía dos perros, que fueron hallados muertos en el patio de la casa en la que se desató el tiroteo, a los que llamaban "perros del infierno".
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Según las autoridades, la familia no tenía historial crimal.
Y, aunque se desconocen las razones que desató el tiroteo, los oficiales encontraron propaganda religiosa dentro de la casa, por lo que sospechan que pudo deberse a "extremismo religioso".
