Los padres de los tres niños que fallecieron en un accidente vehicular en una intersección de Poinciana hace un año no entienden porque aún no se ha hecho justicia. La abuela de los menores tambien iba a bordo del auto y murió cuando, según la policía, un joven de 15 años los impactó.
El adolescente de 15 años presuntamente involucrado en un accidente mortal en el que murieron una abuela y sus tres nietos en Poinciana, se entregó este viernes.
El abogado del joven dijo a TELEMUNDO 31 que se entregó voluntariamente en el centro juvenil del condado Orange.
Su detención ocurre un día después de que su padre, Richard Seymour Ferguson, de 68 años, fuera detenido por cuatro cargos de “homicidio vehicular”.
Cómo ocurrió el accidente mortal
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De acuerdo con la orden de detención, las autoridades acudieron a un accidente de tránsito en la calle San Miguel y la avenida Laurel en que estaban involucrados un Honda HR-V y un Chevrolet Impala, en el que iban a bordo cuatro jóvenes de 15 años.
En el accidente, tres niños de 1, 9 y 11 años y su abuela, Trinidad Hernández, de 50 años, perdieron la vida.
La familia estaba a tan solo dos minutos de la casa de la madre de los menores, cuando los abuelos regresaban a sus nietos luego de disfrutar juntos el domingo.
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Por qué se detuvo al padre
La orden de detención alega que Ferguson permitió a los tres menores subir a un Chevy Impala blanco que estaba estacionado en su residencia. Luego, el padre del menor movió una camioneta estacionada detrás del auto conducido por el menor, permitiéndoles salir.
Ferguson le dijo a su hijo y a sus pasajeros menores que se abrocharan el cinturón y volvieran enseguida, según el documento.
El menor se dirigió entonces a casa de sus primos, se separó de su amigo y condujo el vehículo hasta el parque Deerwood en lugar de regresar a casa.
Según el documento oficial, permanecieron en el parque durante aproximadamente 5 minutos. Cuando se marcharon, el menor giró a la derecha desde el parque hacia Laurel Avenue, en dirección norte. El segundo vehículo implicado en el accidente circulaba en dirección oeste por San Miguel Road acercándose al cruce de Laurel Avenue.
La orden de detención indica que los pasajeros del vehículo en el que viajaba el niño se dieron cuenta de que no reducía la velocidad y le gritaron en voz alta que se detuviera, en cuyo momento se produjo el accidente.
Un testigo que circulaba en bicicleta por el parque y presenció el accidente le dijo a la policía que no cree que el menor usó sus frenos.
Según las autoridades, el adolescente que chocó el vehículo en el que murieron tres hermanos y su abuela, no tenía licencia de conducir ni de aprendizaje.
