El presidente estadounidense, Donald Trump, pidió este miércoles a los manifestantes que se concentraron en Washington y que asaltaron el Capitolio de manera violenta "regresar a casa en paz".
En un video publicado en Twitter más de dos horas después del asalto a la sede del Legislativo, Trump declaró: "Se tienen que ir a casa ahora, tenemos que tener paz. Tenemos que tener ley y orden. No queremos a nadie herido. Es un período muy difícil".
"Necesitamos paz, así que vayan a casa. Los queremos, son muy especiales", dijo el presidente, después de que el mandatario electo, Joe Biden, cuya victoria debía quedar ratificada este miércoles en el Congreso, compareciera ante el país y reclamara a Trump pedir de inmediato el cese de la violencia.
El mandatario saliente reiteró su denuncia de fraude electoral, pese a que no hay pruebas del mismo y a que todos los estados han certificado sus respectivos miembros del Colegio Electoral.
"No queremos a nadie herido", aseguró el mandatario saliente, quien añadió: "Han visto cómo nos tratan, de tan mala manera. Sé como se sienten, pero vayan a casa ahora".
Trump contestó así a los disturbios y al asalto por parte de centenares de simpatizantes al Capitolio, que obligó a suspender la sesión de certificación de la victoria electoral de Biden, un proceso hasta el miércoles puramente de trámite, y a desalojar a los legisladores y al vicepresidente, Mike Pence, del Capitolio.
Las principales redes sociales censuraron el video publicado por el presidente. Facebook lo removió por completo, mientras que Twitter desactivó las opciones de retuitear, compartir, comentar o dar "me gusta", debido al "riesgo de violencia".
Según las leyes que rigen el proceso electoral de Estados Unidos, ambas cámaras del Congreso debían reunirse este día en una sesión conjunta para abrir y contar los certificados de los votos electorales correspondientes a cada estado del país.
Biden pidió a Trump, poco antes de la publicación de su video en las redes sociales, que compareciera en un mensaje televisado a la nación para "defender la Constitución" y poner "fin al asedio" al Congreso, tras el asalto violento de miles de sus seguidores.
Trump ha animado a esta concentración en Washington como medio de presión para evitar la confirmación de la victoria electoral de Biden, que debe culminar con su toma de posesión el 20 de enero.
El mandatario compareció el miércoles frente a sus seguidores para arengarlos y reiterar sus acusaciones de fraude poco antes de que una parte de ellos asediara el Capitolio y lo tomara por la fuerza, rompiendo ventanas y abriendo puertas hasta suspender la sesión prevista.