La tormenta tropical Isaías tomó rumbo norte la tarde del domingo sin haber causado daños significativos en el sur de la Florida.
Según el último boletín emitido por el Centro Nacional de Huracanes a las 11 p.m. del domingo, Isaías tenía vientos sostenidos máximos de 70 millas por hora y el centro de la tormenta se ubicaba a unas 50 millas al este de Cabo Cañaveral. El sistema se desplazaba en dirección norte-noroeste a razón de 9 millas por hora.
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El Centro Nacional de Huracanes canceló todos los avisos de tormenta tropical a lo largo del sur de la Florida, mientras la debilitada tormenta Isaías seguía moviéndose frente a la costa en dirección norte-noroeste.
La interacción con islas de Bahamas, la llegada de aire seco y el viento fuerte en altura debilitó a Isaías y le hizo perder estructura durante la tarde y noche del sábado, por lo que el CNH ya no espera que recupere su categoría de huracán.
Afectaciones en costas de Florida
EEUU
La tormenta tropical pasó casi sin ser vista por la costa del condado Saint Lucie. En lugar de refugiarse hoy cientos de residentes de Fort Pierce hicieron del paso del sistema una ocasión para compartir animadamente en familia.
Sin embargo, casi todos los negocios estuvieron cerrados y sólo las estaciones de gasolina prestaron su servicio. Algunos habitantes locales dicen que están casi habituados a este tipo de tormentas en su ciudad. Otros dicen que se atrevieron a salir debido a que la fuerza de Isaías se degradó pasando de huracán cateforía a tormenta tropical.
Afortunadamente la madre naturaleza también fue benévola con el condado Palm Beach donde el paso de la tormenta tropical Isaías no dejó mayores daños, tan solo unos pocos árboles caídos y algunas líneas eléctricas tumbadas.
Para el alcalde del condado esto fue un aprendizaje, Dave Kerner, dijo que "ciertamente hemos aprendido mucho de esto fue una gran oportunidad para prepararnos como condado y gobierno condal en caso que una tormenta más grande nos golpee en el futuro”.
Durante el día muchas personas se acercaron a la playa, algunos aventureros para surfear en el fuerte oleaje.
Por su parte las autoridades de Hallandale tuvieron un mensaje para todos los residentes en esta temporada ciclónica.
Camiones del departamento de obras públicas de la ciudad de Hallandale se dieron a la tarea este domingo de recoger escombros desechados antes y después del paso de la tormenta.
Jeremy Earle, asistente del administrador de la ciudad, dijo que trabajaron intensamente para recolectar los desechos en días recientes, al tiempo que envió un mensaje a los residentes de no continuar dejando los escombros en las afueras, Y es que numerosas eran las pilas dejadas en la ciudad.
Florencia Olivera, portavoz de FPL aseguró que había “restablecido el servicio a casi 20 mil clientes” según un reporte de las 9 de la mañana.
Las autoridades municipales dijeron que es necesario que se mantengan las bolsas de arena durante toda la temporada ciclónica por lo menos hasta que finalice, para que puedan ser usadas ante otras eventualidades.
Gobernador de Florida declarada emergencia
El gobernador de la Florida, Ron DeSantis, declaró el estado de emergencia para todos los condados a lo largo de la costa este del estado desde Miami-Dade hacia el norte.
Pero en el sur de la Florida, la ciudad de Miami ya anunció la reapertura de parques, piscinas, marinas y restaurantes al aire libre, que habían sido cerrados desde el viernes en la noche.
En la zona de Brickell que generalmente sufre inundaciones tras intensas lluvias reinó la normalidad. Sin embargo, algunas de los apartamentos pusieron las contraventanas de protección contra huracanes.
Bahamas vuelve a padecer un huracán
A su paso por las islas Isaías dejó inundaciones y derribó tejados, con especial saña en la isla de San Salvador. La empresa estatal de agua y luz cortó los servicios para mayor seguridad.
Sin embargo, no se han ofrecido cifras de las personas afectadas. Los funcionarios de salud dijeron que una de las principales preocupaciones era la gran cantidad de sobrevivientes del huracán Dorian de categoría 5 que pasó hace casi un año, muchos de los cuales aún residen en Gran Abaco debajo de carpas en sus patios traseros.
Con los recuerdos del huracán Dorian aún en carne viva, muchos de los que vivieron esa tormenta mortal aún intentan recomponer sus vidas.
Fue la tormenta más fuerte que haya golpeado el archipiélago atlántico en su historia, y asoló las Islas Ábaco y Gran Bahama, en el área noroeste, desplazando a miles de individuos y provocando la muerte de más de 70 personas.
Isaias fue la primera tormenta que azotó a las Bahamas en la temporada de huracanes del Atlántico 2020.
